Primero lavamos y cortamos y picamos bién todas las verduras y un una cacerola con un poco de aceite, hacemos un sofrito removiendo de vez en cuando hasta que se vean medio hechas, para seguidamente añadir la carne previamente troceada, seguimos con el sofrito moviendo con una paleta de madera y dejamos que se siga haciendo añadiendo antes un poco de sal al gusto.
Pasados unos 10 minutos, le incorporamos el tomate bién picado, la zanahoria picada, las hojas de laurel, una chucharadita de pimentón dulce, removiendo éste para que no se queme y se disuelva y el vaso de vino blanco, lo seguimos cocinando todo hasta que se evapore el alcohol del vino y se haya sofrito bién todo a fuego medio o lento.
Pasado ese tiempo y una vez sofrito, añadimos las patatas que ya estarán peladas y cortadas en trozos no muy grandes, siempre es mejor troncharlas un poco con el cuchillo que darles un corte totalmente limpio, porque espesarán más el caldo, y lo cubrimos todo bién con agua.
Lo dejamos cociendo a fuego medio unos 20 o 30 minutos una vez eche a hervir, removiendo de vez en cuando, si vemos que necesita mas agua, se la incorporamos, o si al final vemos que está demasiado caldoso, sacamos un par de patatas, las machacamos con el tenedor y las devolvemos al guiso, antes de terminar, comprobamos de sal y rectificamos si fuese necesario, apagamos el fuego y dejamos reposar unos 5 minutos antes de servir. |
Esta receta puede hacerse con casi cualquier tipo de carne que sirva para guisar, con magro de cerdo, con cabezada etc. y siempre se le pueden añadir unas costillas o un trozo de tocino, eso ya queda al gusto del que la elabora o a la disponibilidad de los ingredientes, pero siempre quedará muy bién.
|